Gentes de mi tiempo
Manuel Azaña
Reino de Cordelia
Edición de José Esteban
326 Páginas
20,95 €
A pesar de la admiración que una minoría de españoles siente por Manuel Azaña, su obra es poco y muy mal conocida. Y eso pese a que en ella están ya denunciados los graves problemas que nos persiguen todavía hoy en día. Para paliar ese vacío, el escritor y editor José Esteban ha realizado una antología, expurgando los textos más representativos del presidente de la República. En este tomo ha seleccionado la opinión que le merecían a Azaña los protagonistas de la cultura y sociedad de su tiempo. Por su visión crítica y acerada, poco dada a soportar la imbecilidad y siempre despiadado en afán de combatirla, pasan escritores como Unamuno, Jacinto Benavente o Ramón Martía del Valle-Inclán, los hermanos Eduardo y José Ortega y Gasset y Marcel Proust, pero tampoco olvida a los militares, al Estatuto Catalán o a los comunistas. El gran político republicano dirige su mirilla a la Guardia Civil, los frailes, la Iglesia española, el Ejército, la Corona y el Museo del Prado… Un libro sorprendente y valiente que parece referirse a la realidad actual.
Es bien sabido que, entre nosotros, existe y persiste un pertinaz intento de agrupar a los intelectuales en generaciones. Así, han sido canonizadas varias, por no decir muchas. Solo, y esto muy modernamente, contamos con la del 98, con la del 14 (que incluye a Azaña), con la del 27, con la del 36,
con la más reciente del 50 y estamos a la espera de que surjan algunas más.
En nuestras letras, la aplicación del concepto de generación se produce cuando el poeta y profesor Pedro Salinas, como resumen de sus clases en la Universidad de Madrid, que recogió luego en Literatura española. Siglo XX, sistematiza esta doctrina, que tiene su origen sobre todo en Julius Petersen y recoge ya la aportación de Azorín acerca de la Generación del 98.
Manuel Azaña
(Alcalá de Henares, 1880 – Montauban [Francia], 1940)
Fue político, periodista y escritor, galardonado en 1929 con el Premio Nacional de Literatura por su biografía La vida de Juan Valera. Su obra más conocida es La velada en Benicarló (1939), una reflexión sobre las causas y desenlace de la guerra civil española que supone su testamento político. Huérfano de padres, estudió Derecho interno en los agustinos de El Escorial, período que rememoró en su novela El jardín de los frailes (1927), y se licenció en la Universidad de Zaragoza con la calificación de sobresaliente, la misma que obtendría al doctorarse. Miembro de la Academia de Jurisprudencia desde 1899, en febrero de 1911 anunció su ideario político con la conferencia El problema español, donde ya establece la relación inseparable entre democracia y cultura. En 1912 es elegido secretario del Ateneo de Madrid y se afilia al Partido Reformista de Melquíades Álvarez. Sus fracasados intentos por salir diputado en 1918 y 1923 le permiten desarrollar su vocación como crítico y escritor; de esa época son las colaboraciones periodísticas recogidas en Plumas y palabras (1930), La novela de Pepita Jiménez (1927), Valera en Italia (1929) y el drama La Corona (1930). Con el golpe de Estado de Primo de Rivera abandona en 1923 el Partido Reformista, un año después de declara abiertamente republicano y en 1925 funda Acción Republicana y es elegido presidente del Ateneo. Proclamada la Segunda República, asume la cartera de la Guerra y en octubre de 1931 reemplaza a Alcalá Zamora en la presidencia del Gobierno, cargo en el que permanecerá hasta 1933 y al que regresará en 1936, ya como principal impulsor del partido Izquierda Republicana. Poco después asume la presidencia de la República.