Llegadas estas fechas, entre los amigos de la librería hago una encuesta. En ella pregunto por la mejor obra de todas las que han leído este año. Y destaco, sobre todo, que haya sido publicada en el año en curso. Suelo prestar especial atención a las pequeñas editoriales, que con sus pocos medios y su gran empeño hacen posible el conocimiento de textos impresionantes que, sin su escrupulosa labor, permanecerían olvidados en los cajones de sus creadores o en las bibliotecas del olvido. Y son muchas las pequeñas editoriales que han sacado buenas obras dignas de mención.
Finalistas entre todos los títulos editados por estas pequeñas editoras han sido:
Una ola con sabor a pez, de Núria Riera Carrillo (Bartleby Editorial)
Tres días en casa de mi madre, de François Weyergans (Editorial Funambulista)
Wakefield, de Nathaniel Hawthorne (Nórdica Ediciones)
Mis santas tías, Bulbul Sharma (Nocturna Ediciones)
Cirkus Columbia, Ivica Djiki (Sajalín Editores)
200 gramos de literatura, de Pedro García Martínez y Antonio Pérez Abril (Editorial Culturajos)
Las guapas deberían morir, de Julia R. Robles (Editorial Tres fronteras)
Chump Change, de Dan Fante (Sajalín Editores)
Un beso, de Ivan Cotroneo (Ediciones del silencio)
Pero, además de todas ellas, mis lectores y amigos me han reseñado una que les ha calado muy hondo.
Las hermanas Bunner,
de la escritora norteamericana Edith Wharton,
publicada por la Editorial Contraseña.
Este es una obra que, a pesar de haber salido al mercado hace prácticamente un año, sigue en la mente de todos sus lectores y que ya va -que yo sepa- por la cuarta edición.
Todo en esta obra es digno de mención:
- El texto es de una precisión milimétrica, contando con una prosa precisa y ajustada a la historia y que, al acabar, nos parece haber leído una obra cincelada en todos grises.
- Si bien su escritora se dio a conocer a través de sus obras de la segunda etapa de su vida en Europa, es de ley reseñar que, simplemente por este breve novela, esté situada en el altar de los inmortales.
- La traducción de Ismael Attrache es delicada y matizada al detalle y encaja a la perfección con el alma de la historia, poseyendo una adjetivación muy acomodada al tiempo y lugar de la trama.
- El estudio del texto, obra de la escritora Soledad Puértolas, nos documenta a la perfección sobre esta trama así como de la vida y demás producción de Edith Wharton en un prólogo que rezuma cariño y buen hacer.
- Y para acabar, una portada de excepción con una ilustración de Elisa Arguilé que, observándola una vez acabada la leer la obra, se nos presenta como un bello y enigmático resumen de ella.
Las hermanas Bunner es una joya de la literatura por la que no pasan los años y que la Editorial Contraseña nos ofrece y descubre en una edición inmejorable y digna de una merecedora y selecta biblioteca.
Mi enhorabuena a las editoriales que han hecho posible la edición de estas diez obras seleccionadas por los lectores de la Librería de Javier.