Alfonso, el representante de Random House Mondadori para la zona de Madrid me dio una invitación para el acto que organizaba la editorial con motivo de la llegada a España de Ken Follet. Lo único que me dijo es que no se me ocurriera llevar ningún libro ya que no venía por ello. Que me olvidara de firmas y demás. ¿Y a qué venía, pues? me pregunté.
La expectación era máxima y la hora de la presentación –nos dijeron que fuéramos con tiempo-, las diez de la noche. Lugar: el Florida Park, en pleno Retiro, a pocos metros de la caseta que lo organizaba. Y allí nos plantamos. Los camareros empezaron a amenizarnos las esperas con todo tipo de canapés. Y bebida que no falte. Y así, entre pinchito y trago, se nos fue pasando el tiempo. Media hora. Tres cuartos. Una hora. ¡Dios! Ni que estuviera redactando la tercera parte de Los Pilares de la Tierra…
Y por fin, cuando ya estábamos con los postres, aparece. Enfundado en una chupa rockera roja con un bello estampado en la espalda, con vaqueros gastados y custodiado por dos jovencitos de otros cincuenta y pico con sendas guitarras a cuestas. Detrás, la batería. A la izquierda, el teclista, y un poquito lento para mi gusto. Empieza a tocar y cantar y nos quedamos todos con la boca abierta. Ken Follet, el de los Pilares, dando saltos como un descosido en pleno escenario, chillando a todo pulmón con una voz bien quebrada y desgranando riffs con el bajo retando al más puro estilo Rolling a los guitarras. Puro Rock and Roll. Increíble. Y yo que me le había imaginado tranquilito en una silla improvisando acordes de Jazz…. Al tercer tema sale una negrita con el ritmo inyectado en las venas y ya estamos todos los libreros dando saltos como chiquillos. (Qué vergüenza si nos vieran nuestros distinguidos clientes). Tres cuartos de hora de recital a toda pastilla al más puro estilo Chuck Berry. Y para acabar Ride, Sally, ride con los sesudos editores y elitistas clientes dando palmas y coreando. ¡Qué noche la de aquel día!
Esta vez sí que me convenció Ken Follet. Y sin relleno de por medio…
