Empezamos con las más difíciles. No todo ha de ser meterse en la web y en el Google recorto y pego y… ¡ya esta! Esta vez no, hay que currárselo un poquito. No es que haya que rebuscar en la Biblioteca de Alejandría ni tampoco es necesario tener una memoria de elefante para recordar toda las frases iniciales de todo lo que habéis leído últimamente, pero esta novela seguro que sí que la recordáis.
Mi único recuerdo de la guerra es la noticia de la muerte de mi hermano Ramón.
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La conozco…