Sin plumas
Woody Allen
Tusquets editorial
Cuadernos ínfimos
212 Páginas
Encontrado en un banco
El que fue librero hasta hace unas semanas os va a seguir hablando de libros.
Os habréis dado cuenta de que, a pesar de tener el enlace de la página con el nombre de mi desaparecida librería (en caso de quitar la url desaparecería todo el contenido), el blog ha pasado a llamarse Las recomendaciones de Javier, y en el que os haré comentarios de obras de todo tipo, no sólo de actualidad.
Para amenizar un poco más este apartado de críticas, y ahora que tengo mucho más tiempo libre, os voy a hacer unas reseñas más espaciadas y con obras de origen muy diferente. Una de mis aficiones es visitar librerías de segunda mano, mercadillos benéficos y de calle, y husmear aquí y allá. Fruto de ello serán algunas recomendaciones de lecturas de obras ya usadas pero que creo que merecen ser rescatadas del olvido. Y que, además, podréis encontrar por un precio mucho más reducido.
La primera de ellas es Sin plumas, una de las primeras recopilaciones de historias y pequeños relatos de Woody Allen y que creo imprescindible para aquellos que se han interesado por sus películas.
Sin plumas, en la edición que tengo en la mano, y que me encontré olvidada en un banco de un parque, recoge los escritos humorísticos de este iconoclasta director de cine y que están fechados entre los años 1972 y 1975. La publicación en España fue un año después, en 1976, un año después de su aparición en Estados Unidos.
Sin plumas toma el nombre de un escrito de Emily Dickinson:
¡Qué equivocada estaba Emily Dickinson! La esperanza no es “esa cosa con plumas”. La cosa con plumas ha resultado ser mi sobrino. Tengo que llevarle a un especialista en Zurich. (p.11)
Esta segunda obra de Woody Allen sigue la estela de su anterior Cómo acabar de una vez con todas con la cultura. Nos trae historias, todas en clave de humor socarrón y con gran carga existencial e intelectual,. Los escritos que incluye hacen referencia a la vida, la muerte, las creencias, las mujeres, el ateísmo, el sexo y el paso del tiempo. Dentro de este libro nos encontramos las dos famosas obras de teatro de título Dios y Muerte, así como el famosísimo Si los impresionistas hubieran sido dentistas, la Guía breve, pero útil, sobre la desobediencia cívica urbana o el descacharrante Duelo de ingenio con el inspector Ford. He de remarcar que a día de hoy varios de estos escritos pueden parecer poco apropiados con la política actual de derechos e igualdad de los tiempos que corren.
El humor de Woody Allen es un tanto especial, y no apto para todos los públicos. Tiene un marcado toque de cultura, amplios acotaciones literarias e históricas, que le hace muy cercano a la serie de televisión Big Bang Theory, y soy consciente de que a muchos lectores le puede hacer desesperar y odiar.
Sin plumas no ha envejecido demasiado y sus temas siguen siendo de actualidad. Es un libro que está aún disponible en la editorial y que merece el precio que cuesta (7,95 euros) aunque, para los que no les importa leerlo de segunda mano, he visto un anuncio en Wallapop por el que piden por él dos euros en esta edición original, con la portada plateada.
Buena recomendación. No lo conocía y me encanta Allen. Este año me ley su libro de «A propósito…» y me gustó mucho. Me lo compraré